Con el fin de las vacaciones para muchos, toca la vuelta al trabajo. Las ciudades se llenan de coches y los atascos vuelven a estar a la orden del día. Desde la Fundación de Apoyo a Víctimas de Accidentes FUNDTRAFIC queremos enumerar una serie de consejos para que el trayecto de casa al trabajo y vicerversa transcurra sin imprevistos. Según datos del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT), 63.746 accidentes de trabajo fueron ‘in itinere’ y 37.723 de ellos fueron de tráfico en 2013 en España.
En primer lugar, debemos determinar el medio de transporte que vamos a utilizar. Hay que tener en cuenta el tráfico, el tiempo que tardamos, la seguridad que hay en el trayecto (estado de la carretera por la que circulamos, estado de nuestro vehículo)… a partir de ahí, tendremos que elegir el medio de transporte que mejor se adapte a nuestras necesidades. La bicicleta o ir andando son alternativas cuando el trayecto al trabajo no es muy largo. Sin embargo, si nos encontramos con trayectos con algo más de distancia o que son en ciudad, una buena opción es el transporte público. Por el contrario, si el medio elegido es el coche, tendremos que poner en práctica una serie de consejos que nos disponemos a detallar:
-Asegúrate de que tu vehículo está en perfectas condiciones. No sólo debemos revisar el coche cuando nos disponemos a realizar un viaje largo (como suele ocurrir en vacaciones). Debemos hacerlo de manera periódica: estado de los neumáticos, líquidos, frenos, dirección…
-A continuación, planifica el recorrido que vas a realizar. Desde Fundtrafic aconsejamos seleccionar varias vías alternativas e ir cambiando. De esta forma, evitaremos el conocido ‘conductor automático’, ese trayecto que realizamos sin apenas darnos cuenta de lo que hemos hecho ya que nos sabemos el camino de memoria. Además, de esta forma tendremos varias vías ante imprevistos.
-Consulta el estado del tráfico y valora las condiciones climatológicas a la hora de elegir vehículo y desplazarte. Por supuesto, es vital la planificación del tiempo. Si sabemos que vamos a encontrar tráfico o que hay lluvia, organiza bien tu salida y hazlo con antelación, eligiendo las vías más seguras y con menos incidencias.
-Calma. Es uno de los de los factores más importantes. Evita el estrés. Aquí juega un papel importante la organización del tiempo. Si salimos con tiempo, evitaremos las prisas. Correr no es una solución, es un riesgo que no debemos asumir.
En esta línea, recuerda cumplir siempre con las normas de tráfico, respeta los límites de velocidad, lleva siempre el cinturón de seguridad, respeta los semáforos, los pasos de cebra… Por supuesto, evita las distracciones al volante. El conocido ‘coche oficina’ es un peligro para la seguridad vial. Conducir y hablar por el teléfono móvil está completamente prohibido a no ser que dispongas de manos libres. Es su caso, úsalo lo menos posible. Las conversaciones también hacen que no prestemos el 100% de nuestra atención a la conducción. Incidimos aquí en la importancia de no escribir mensajes de texto al volante: nada de wasapear.
-Si vas a llevar a tus hijos al colegio de camino al trabajo, hay que tener esto en cuenta e incluirlo en la planificación y trayecto. Por supuesto, recuerda que los niños deben ir con el correspondiente sistema de retención infantil adecuado a su talla y peso.
-Queremos hacer hincapié en la importancia de cumplir con los Planes de Riesgos Laborales desarrollados por las empresas, así como con los Planes de Movilidad. Cada vez son más las compañías, no son ya sólo las grandes, sino también las pequeñas y medianas, las que desarrollan planes específicos para reducir la siniestralidad vial laboral: cursos de formación, itinerarios, horarios flexibles, vehículos con los últimos sistemas de seguridad en sus flotas…. Es necesario conocerlos y cumplirlos.
-En la salida del trabajo, sigue los consejos mencionados anteriormente. Hazlo sin prisas y con calma, respetando las normas de circulación y al resto de usuarios. Lo importante es regresar a casa.